“El desafío de acceso a la información compete tanto al gobierno como a los ciudadanos”, enfatizó el canadiense David Eaves, experto en políticas públicas y activista del gobierno abierto, en la clase magistral del III Seminario Internacional del Consejo para la Transparencia, “Impacto en el Derecho de Acceso a la Información en la Participación Ciudadana”.
Eaves explicó que una persona posee menos información que el gobierno, pero todos los ciudadanos manejan muchísima más que su gobierno y para éste vital contar con toda ella.
“Es necesario ampliar el alcance de la transparencia a todas las personas”, dijo Eaves, quien enfatizó que el acceso a los datos tendría que ser libre. “El valor no está en conseguir la información sino en el análisis de ésta”, acotó.
Agregó que los datos son un objetivo estratégico, tan importante como la infraestructura y las carreteras.
Para que el acceso a éstos sea realmente abierto existen tres aspectos críticos: que puedan encontrarse, ya que si no es posible localizarla, la información no es abierta; que puedan leerse fácilmente; que su acceso se dé en un marco legal que permita compartirla.
David Eaves, asesora a varios gobiernos en políticas públicas y en dato abierto; trabaja con dos spin-offs del Proyecto de Negociación de Harvard y asesora a empresas sobre estrategias de gestión de código abierto y comunidad. Frecuentemente ofrece conferencias sobre estos tópicos, así como de formulación de políticas, negociación y estrategia y sobre cómo dichos métodos y el dato abierto pueden ayudar a que un gobierno sea más efectivo y eficiente.