- El Consejo para la Transparencia solicitó al órgano analizar si la medida es “proporcional” al fin que se persigue, dado que los datos de niños, niñas y adolescentes son datos sensibles que requieren especial protección.
- Apunta también a que parte de los menores de distintas regiones del país son estudiantes en situación de vulnerabilidad, por lo que se deben tomar más resguardos y evitar una eventual discriminación por situación socioeconómica.
En virtud de las facultades del Consejo para la Transparencia (CPLT) para velar por el adecuado cumplimiento de la ley de Protección de Datos Personales en los órganos del Estado, la entidad ofició a la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB) para solicitarle analizar los sistemas de identificación biométrica implementados por esta entidad para la entrega de más de 4 millones de raciones alimentarias.
El Consejo apunta a la necesidad de resguardar y tratar adecuadamente datos personales y sensibles de niños, niñas y adolescentes de diversas regiones del país, asociados a sus características físicas, usados para certificar un adecuado uso de los beneficios de alimentación del Programa de Alimentación Escolar (PAE) y Programa de Alimentación Párvulos (PAP).
El presidente del Consejo, Marcelo Drago, detalló que este tipo de sistemas “utilizan datos personales sensibles junto a su información biométrica asociados a la conducta alimentaria de un grupo de menores del país, los que pueden vincularse por ejemplo a información sobre su salud”. “SI esa posibilidad existe, cabe impedir actos discriminatorios derivados de un uso inadecuado de los datos”, subrayó el representante del CPLT.
Según consignó el documento remitido por el Consejo para la Transparencia a la JUNAEB (Oficio N°053), es importante determinar que la medida sea proporcional al objetivo buscado. Esto dado que identificar a menores de edad, muchos de los cuales se encuentran en situación de vulnerabilidad, implica mayores complejidades y riesgos en materia de tratamiento y protección de datos, y requiere de estándares de seguridad más exigentes.
“Acá hay que revisar el principio de proporcionalidad del tratamiento de datos y creemos que la autoridad debe explicar si ésta era la única forma de fiscalizar el uso de este beneficio y por qué”, afirmó el titular del Consejo. Agregó que se busca también “evitar que esta base de datos se transforme en un catastro de niños, niñas y adolescentes que después puedan ser discriminados por ser pobres”.
Al respecto, el presidente del CPLT, Marcelo Drago, explicó que inicialmente se solicitaron antecedentes a la JUNAEB sobre los sistemas implementados con el fin de “conocer las razones por las cuales se establece la necesidad de solicitar datos biométricos para un proceso de identificación cuya solicitud es más invasiva”.
Tras recibir los descargos de la JUNAEB, el Consejo Directivo del Consejo para la Transparencia determinó el envío de una serie de recomendaciones vinculadas al uso de herramientas de identificación biométricas. Lo anterior en el caso de que la entidad pública insista en mantener este tipo de sistemas. Sin embargo, el CPLT insiste en la necesidad de que el organismo público analice la posibilidad de poner en marcha otro tipo de sistemas para identificar a los beneficiarios que afecten en menor grado los derechos a la intimidad y la protección de datos de los menores.
Las sugerencias remitidas a la JUNAEB apuntan a la adopción de una serie de disposiciones organizativas, materiales y procedimentales que garanticen los máximos niveles de resguardo para los datos de los beneficiarios de sus programas.
Entre ellas: el consentimiento previo, informado, expreso, por escrito y específico de las operaciones de tratamiento y fines planteados de aquella persona que tenga la representación legal del menor; objetivos estrictamente definidos e informados al momento del levantamiento de los datos; condiciones para almacenar, conservar y eliminar los antecedentes recogidos, entre otras.