- Este mes la iniciativa se encuentra en la Comisión de Constitución Legislación y Justicia del Senado y pasa por momentos clave en su tramitación.
- Se trata del tercer intento en 10 años por modernizar la legislación que data de 1999 y elevar los estándares en la materia a requerimientos internacionales que posibiliten el flujo de datos.
En el marco de la gira que la Comisaria de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género de la Unión Europea, Věra Jourová, el consejero del Consejo para la Transparencia (CPLT), Marcelo Drago, sostuvo un encuentro con la alta autoridad europea para revisar en profundidad una serie de aspectos relevantes del proyecto de ley de protección de datos personales y la situación chilena en este ámbito.
La extensa reunión es parte de la agenda de Jourová que ha contemplado encuentros con representantes del Poder Ejecutivo y parlamentarios, en la que se busca explorar en una futura adecuación chilena a los estándares de la Unión Europea para abrir la posibilidad del libre flujo de datos entre dicho bloque económico y nuestro país.
La cita se desarrolló en un momento clave para la normativa a nivel nacional, dado que actualmente está siendo analizado y votado por los integrantes de la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado-, en un tercer intento en 10 años para modernizar la normativa.
La visita de Jourová busca explicar los beneficios que podría generar una convergencia de la normativa en materia de protección de datos, es decir, una adecuación a los estándares que establece el Reglamento Europeo (GDPR en sus siglas en inglés).
Respecto del encuentro, el consejero Drago explicó que “se discutió la importancia de lograr una declaración futura de país adecuado en materia de protección de datos personales y las ventajas que esto conllevaría para Chile y también para la propia Unión Europea”.
Asimismo, se abordaron detalles de las alternativas que se barajan en el mundo actualmente en el ámbito de la protección de datos y si el proyecto actual que se discute en el Parlamento cumpliría o no con los estándares europeos para las transferencias transfronterizas de datos, en el contexto de una economía global en el ámbito digital que exige a Chile la calidad de “país adecuado” para poder establecer un libre flujo de datos con potencias económicas como la del bloque europeo.