- En la Conferencia Internacional de los Comisionados de la Información (ICIC en sus siglas en inglés), el Consejo para la Transparencia relevó avances a 10 años de su creación.
Esta semana el presidente del Consejo para la Transparencia (CPLT), Marcelo Drago, participó en la Conferencia Internacional de los Comisionados de la Información (ICIC en sus siglas en inglés), que reúne anualmente a las más altas autoridades en políticas de Acceso a la Información Pública a nivel mundial, encuentro en el que expuso sobre la robustez y uso intensivo del sistema de transparencia chileno. “Uno de los de mayor penetración en el mundo”, de acuerdo a cifras del CPLT.
Comparativamente con países que presentan regímenes y una insitucionalidad similares en la materia y conforme a sus respectivas poblaciones, se identificó que Chile tiene el sistema con el “índice de demandas por información pública más altos”. El titular del CPLT detalló que en 2018 el índice de requerimientos de información por cada 100 habitantes mostró una tasa de 1,1 solicitudes de acceso a la información en Chile, lo que lo ubica por sobre los registros de México -con 0,2 requerimientos- y Reino Unido –con 0,1 solicitudes-.
Una tendencia similar se advierte al analizar el número de reclamos o amparos presentados ante el Consejo, los que en 2017 mostraron un índice de 25,3 reclamaciones por cada 100 mil habitantes, nuevamente por sobre Reino Unido –con 8,7- y México y Uruguay, que registran 6,8 y 1,7 reclamos respectivamente.
Estas y otras cifras fueron valoradas por el presidente de Consejo dado que: “mientras más gente haga uso de este derecho (de acceso a la información) de manera más frecuente, mayor es la posibilidad de revelar abusos de poder”.
A partir de la relevancia de la libertad de información y acceso a la información pública como sus pilares principales, Drago subrayó que la llamada “crisis de confianza” instalada en Chile y que se ve reflejada en parte de los resultados del Décimo Estudio Nacional de Transparencia 2018, que apuntan a que un 79% de los chilenos y chilenas considera a las instituciones públicas como corruptas o muy corruptas, urge transformar las relaciones entre Gobierno y ciudadanía, poniendo al accountability o la rendición de cuentas y la apertura “en el corazón de nuestras sociedades”.