El uso de las tecnologías de la información y de la comunicación para mejorar el proceso democrático al interior de las naciones es una de las tendencias relevantes hoy que buscan estimular la participación ciudadana y acceder a sectores menos privilegiados de la sociedad. Con eso en mente se gestó el Debate de Ideas organizado por la Embajada de Francia y auspiciado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la Cepal y el Consejo para la Transparencia.
El énfasis estuvo dado en el hecho que el acceso a la información es un eje clave para la gobernabilidad democrática, y también para lograr la erradicación de la pobreza y el respeto a los derechos humanos. “Sólo en la medida que existan canales que permitan a los sectores más pobres influir en la política, podrá darse un cambio sustancial en el desarrollo social de ese país”, señalaron durante la ceremonia inaugural.
En la apertura, la embajadora de Francia en Chile, Maryse Bossiere, destacó el interés del gobierno de Francia y de la Comunidad Económica Europea en contribuir al debate público en estas materias. Por su parte, Benigno Rodríguez, Representante Residente Adjunto del PNUD en Chile, señaló que la esencia misma de lo que persigue este programa de las Naciones Unidas es la erradicación de la pobreza y el respeto de los derechos humanos, por lo que toda herramienta que permita el acceso a la información por parte de la ciudadanía es un aporte a lograr ese objetivo.
El presidente del Consejo para la Transparencia, Juan Pablo Olmedo, afirmó que los grandes desafíos que tiene el CPLT en este ámbito son el lograr recoger información suficiente para poder medir el real uso del derecho de acceso por parte de los chilenos y buscar herramientas y recursos que permitan lograr que las municipalidades logren asimilarse a los estándares ya logrados por el poder ejecutivo. “Existen asimetrías en cuanto a los recursos, a nivel de estructura y también en lo cultural”, enfatizó. “Las municipalidades en su calidad autónoma no tiene entes aglutinadores que las representen efectivamente, lo que dificulta la comunicación y capacitación”, agregó.
Olmedo aclaró que este desafío se hace mayor en el marco de los programas de reconstrucción que hoy se comienzan a ejecutar en Chile tras el terremoto y tsunami, y en los cuales una gran cantidad de recursos se canalizarán a través de los gobiernos locales. “El país tendrá que rendir cuenta de cómo se recibieron y usaron esos recursos, por lo que es importante incorporar la transparencia en todas las etapas”, puntualizó.